Brindamos asesoramiento legal experto, ofreciendote una solución para hacerle frente al endeudamiento
La reunificación de deudas permite unir los créditos, cuotas de consumo, otras deudas e hipotecas en un solo préstamo. Con esta solución, en lugar de pagar muchas cuotas, se paga una sola que cubre todas las deudas. La ventaja es que esta cuota es menor a la suma de las anteriores. Lo que se paga por mes se reduce del total, como contrapartida se incrementa el plazo de la amortización. A mayor plazo, generalmente también se aumentan los intereses, por lo que el pago total también es mayor. La ecuación es, de esta forma, menos dinero por mes, un plazo más largo, y, probablemente, mayor suma total paga al fin del plazo.
Para poner en marcha este proceso es necesario que el usuario cumpla con determinados requisitos:
Hay situaciones que llevan a la gente a endeudarse. Llega un momento en que las solicitudes de créditos, compras tentadoras, tarjetas sobregiradas, desbordan las posibilidades de pago de cuotas. Los deudores comienzan a retrasarse en el cumplimiento. Los intereses por las moras aumentan las deudas, y el sobreendeudamiento crece. Y en esa situación, la reunificación de deudas es la salida que soluciona la vida.
Al reunificar las deudas, la empresa mediadora, Banco u otra entidad, amortiza todas las deudas que la persona ha contraído. Y a partir de ese momento, el usuario comienza a pagar una sola cuota para saldar la deuda que contrajo con el Banco o empresa que reunificó su endeudamiento.
El beneficio principal es que se reduce la cuantía de la cuota mensual. Esta cuota es menor a las que antes tenía que hacer frente. Como paga menos cuota, la familia puede reorganizar sus finanzas, ordenar y rearmar su economía y hasta iniciar un ahorro para imprevistos. Es decir, que se termina la morosidad y todas sus deudas se nuclean en una única cuota que es menor a lo que pagaba antes por todas.
La tranquilidad de saber que se tiene todas sus deudas cubiertas, es también un beneficio muy importante. El usuario sabe que con esa cuota cancela todo, y no tiene que estar sacando cuentas de lo que debe y de lo que le queda para otros gastos.
Todas las deudas formalmente adquiridas se integran en la reunificación. Se incluyen hipotecas, préstamos personales, tarjetas de crédito. Las deudas con bancos, financieras y comercios se suman en el trámite. No interesa si hay cuotas impagadas y, si hay retraso, igual se consideran dichos importes en la reunificación.
En el momento de la solicitud, el interesado deberá presentar recibos de todas esas deudas que certifiquen el estado de situación.
La crisis que ha provocado el coronavirus tendrá como consecuencia el problema del sobreendeudamiento y la morosidad de las familias. Muchas personas que perdieron sus trabajos deberán re planificar el pago de préstamos y de cuotas de compras. Y la reunificación de deudas se presenta como una buena opción.
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